Aunque los espectadores españoles no puedan dejar de pensar
en Los Serrano si hablamos de sueños y televisión, hay casos anteriores en los
que se empleaba esta técnica. El caso más famoso es el de Twin Peaks, en el que
su escena más famosa pertenece a un bizarro sueño premonitorio del
protagonista, el agente del FBI Dale Cooper.
Algunas series “hijas” de Twin Peaks, como Lost también
conservaron de su “madre” la importancia de los sueños premonitorios con
respecto la trama. En dicha serie, que un personaje tuviera un sueño
premonitorio era síntoma de que era especial.
A veces, los sueños que vemos en pantalla nos muestran un
dilema del protagonista. Así, nos encontramos con los sueños de Tony Soprano a
lo largo de toda la serie de Los Soprano. A dos metros bajo tierra es otra
serie donde vemos sueños recurrentes. Los hay de todos los tipos, lo que nunca
les falta es ese toque de realismo mágico que impregna toda la historia.
Pero también tenemos episodios especiales donde todo se
desarrolla alrededor de un sueño. Los casos más sonados los encontramos en Buffy
Cazavampiros con el episodio final de temporada titulado Restless y La
picadura, de la serie de animación Futurama.
Por último recordamos dos series cuyos personajes sufren un
cambio de personalidad en los sueños que se muestran al espectador. El caso más
sonado es el de Felicity y sus últimos episodios de la serie, pero más reciente
también hemos visto algo parecido en Bones y en una breve escena de House.
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